conseguía regatear a Burki para anotar el segundo gol en el 17 de la primera mitad. La primera parte acabó con un 4 a 0 con un Bayern que, pese al resultado, está muy lejos de ser una potencia mundial en el fútbol. El juego del conjunto bávaro se ceñía en centrar balones al  área y esperar el remate directo o una segunda jugada. Con este método consiguieron 3 de los 5 goles que anotaron en el partido. Por otro lado, gran parte de la goleada fue gracias a la pasiva defensa del Dortmund que demuestra así que la eliminación de Champions ante el Tottenham no fue casualidad. Sin duda, “Der Klassiker” está muy lejos, por lo que a nivel de ambos equipos respeta, de la final de la champions de la temporada 2012-13.

Lo mejor del partido sin duda fue el centrocampista alemán Gnabry Serge. Con el 22 a la espalda fue el jugador más destacado del partido y el único que salía de la monotonía y proponía un fútbol que no se basaba en balones largos. Con gol y asistencia, Gnabry demostró que tiene un nivel mayor al que tiene la Bundesliga actualmente.

Con esta victoria los de Munich dependen de si mismos para ganar la séptima Bundesliga seguida, y seguir haciendo historia en el fútbol alemán.